PILAR SARTO FRAJ
opinión Acción Solidaria Aragonesa
Hoy es 11 de enero, me he acordado de las niñas y niños gazatíes los días de la celebración de los Reyes Magos… nuestros niños y niñas buscan sus regalos y los celebran, los niños y niñas gazatíes valoran el único regalo que tienen de momento, su vida, con la inseguridad de que mañana puedan no tenerla. Vi el día de Reyes unas imágenes de niñas y niños en Gaza haciendo cola para recibir un plato de comida… en esta ocasión se peleaban para llegar a la primera fila y recibirla, lloraban, gritaban, se dolían y nos dolían; los más fuertes aplastaban a los más pequeños para pasar su cuenco… se genera más odio contra los iguales, contra los propios. Es la ley de la selva, sin esperanza, sin futuro.
Ya no es noticia que en los últimos dos días haya habido al menos 32 muertos y más de 190 heridos en Gaza… son noticia los muertos en Los Ángeles y los dos muertos israelíes que se han encontrado, de los que se cita su nombre, procedencia, oficio, relaciones familiares, etc… Los muertos gazatíes no tienen nombre, no tenían vida, son un número sin más… es la deshumanización total.
¿Conocemos los nombres de los niños muertos, el dolor de sus familias, sus avances escolares, sus sonrisas, sus sueños truncados? Nos hacen sentirnos impasibles ante tanta atrocidad mediante la acumulación de datos y por considerarse que ya ha terminado el genocidio y la limpieza étnica cuando no se habla de él.
Anteayer y ayer ha habido ataques en Rafah, extremo sur de la Franja, en el área humanitaria de Mawasi; también en el sur; en los campos de refugiados de Bureij y Nuseirat, en el centro del enclave; así como en Yabalia. Se han bombardeado apartamentos en la ciudad de Gaza situados cerca de las mezquitas Al Kanz y Al Shamaa.
En quince meses de guerra, los muertos confirmados ascienden a 46.537 y los heridos a 109.571, según los registros de los hospitales del enclave, aunque se estima que hay más de 11.200 desaparecidos bajo los escombros, cuyos cadáveres no han podido aún recuperarse ni cuantificarse.
Más de 1.600 familias han sido totalmente exterminadas y borradas de los registros en la franja de Gaza de la Franja tras la muerte de todos sus miembros. Además, 3.471 familias han quedado con un único miembro vivo.
Un estudio publicado ayer por la revista científica británica The Lancet estima que la cifra oficial de muertes entre el 7 de octubre de 2023 y el pasado 30 de junio podría ser un 70 % superior a los datos difundidos por las autoridades gazatíes, ascendiendo a 64.260.
¿Cómo puede estar pasando delante de nuestros ojos y seguimos sin pararlo?
Creo que el mejor regalo para el pueblo palestino es la vida, la justicia y la esperanza. No llegan los Reyes Magos, tampoco les dejarían pasar las fronteras con suministros, como lo hacen con las organizaciones de ayuda humanitaria.
Pero aún y todo, quiero pensar que la humanidad saldrá del letargo y valorará las vidas palestinas, empujando “para que pueda ser”.