Un grupo de 50 personas se desplazaron de Daroca a Llutxent, donde disfrutaron de una comida de fraternidad
Los darocenses reforzaron su vínculo de unión con los vecinos de Luchente (Llutxent) con el viaje que realizaron a esta localidad valenciana el pasado 24 de febrero.
Enmarcado en el hermanamiento entre la ciudad darocense y Luchente y Carboneras de Guadazaón, este encuentro sirvió para la reunión de las autoridades de cada municipio y sus vecinos. En el caso de Daroca, fue el concejal Alfredo Llop quien se desplazó en representación del equipo de Gobierno.
Para Llop, representar a Daroca es “el mayor orgullo porque soy ciudadano de Daroca y siempre he defendido a mi pueblo”, comentó. El concejal de VOX se mostró muy agradecido por el trato recibido en Luchente. “La gente de Daroca estaba muy ilusionada, el acto fue muy emotivo y nos reencontramos con gente conocida de otros años que vienen a Daroca”, detalló.
El edil destacó que lleva muchos años “siendo de la Esclavitud de los Corporales e ir a Luchente ha sido un orgullo porque soy de los que sienten de verdad la venida de los Corporales a Daroca”, añadió.
Alrededor de cincuenta personas se desplazaron desde Daroca y disfrutaron de una eucaristía y una comida de fraternidad.
El pasado año, los Ayuntamiento de Daroca , Luchente y Carboneras de Guadazaón rubricaron tres firmas de hermanamiento. Este representa su vinculación histórica por el Milagro de los Corporales, el que, según la tradición, ocurrió en Luchente en 1239, mientras que Daroca es la localidad que lo custodia, y Carboneras de Guadazaón la que guarda la Santa Hijuela que acompañaba el Corporal.