Vecinos y recreacionistas han impulsado la primera edición, a la que acudieron numerosos visitantes interesados
Los combatientes de la Guerra Civil Española se volvieron a ver en Singra 86 años después, pero esta vez en un escenario totalmente diferente y en el que, precisamente, era la paz y la armonía la que reinaba.
La localidad jilocana representó la batalla librada en enero de 1938 en la primera edición de las Jornadas de la Guerra Civil de Singra, celebradas el pasado fin de semana. Una iniciativa organizada por el Ayuntamiento en colaboración con voluntarios del pueblo y coordinada por Gonzalo Luna y Fernando Alonso, del Grupo de Recreación Histórica Retaguardia de Zaragoza, al que se sumaron más de 30 recreacionistas de otros colectivos de Barcelona, Madrid o Valencia, y todos ellos lo hicieron de manera altruista.
Sin fondos para financiarse, con voluntariado y cubriendo gastos con las ventas en la barra dispuesta el pasado sábado y domingo, la primera Recreación Histórica de la Batalla de Singra ha logrado ser un auténtico éxito, gracias a las actividades desarrolladas y la respuesta del público, que en su mayoría procedía de otros puntos de Aragón y otras comunidades autónomas. “No nos esperábamos tanta gente, se han superado todas las expectativas”, ha señalado el alcalde de Singra, José Javier Fuertes.
Las Jornadas comenzaron el sábado con las recreaciones y la apertura de la feria en el pabellón, donde se podían adquirir antigüedades, artículos de diversos tipos y de coleccionismo, productos gastronómicos, etc., con una veintena de feriantes presentes en total. “En la organización nos ayudó mucho Vicente Catalá de El Viejo Desván de la Tomasa, de Bañón”, ha destacado Fuertes.
En esta novedosa iniciativa se pudo revivir un asalto a un centro de mando republicano, el funcionamiento de una cocina de campaña, la atención a los heridos en un puesto médico o un puesto de costura, entre otros escenarios. Y los propios recreacionistas interpretaban, contaban la historia e interactuaban con los asistentes.
El domingo, el público volvió a responder con creces y acudió a las visitas guiadas en las trincheras, los Cabezos de Singra.
Otra de las actividades de esta cita fue la presentación del libro ‘Camino a Singra’ del escritor Rafa Saiz, en un acto guiado por el cronista Jesús Lechón. Asimismo intervino el coronel Francisco Javier Aguirre para contar cómo se desarrolló la batalla.
Singra ha dado vida a una cita recreacionista, única y pionera en el territorio, y que vuelve a recordar que los pueblos que olvidan su historia están condenados a repetirla.