El mes de agosto es el más festivo de todo el año, en él se concentran la mayoría de las fiestas de muchas localidades de todo el país. Es uno de los meses más calurosos, sobre todo el de este año 2022, lo que favorece la celebración de cualquier evento al aire libre, acentuándose todavía más tras el parón de estos dos años. En las comarcas del Jiloca y Daroca la mayoría de los pueblos, grandes y pequeños, tienen alguna de sus fiestas grandes en estos días de agosto.
En Calamocha este año duran más de lo habitual, más de siete días que comenzaron con la fiesta de la juventud, le siguió el día del desfile de los disfraces organizado por la Peña la Unión, seguido por el chupinazo que dio el pistoletazo de salida definitivo para que conenzaran, y finalizando con el tradicional día de la vaca. Otros como Luco, Lechago o Navarrete ya han disfrutado de sus mejores días del año. Pronto lo harán Monreal del Campo u Odón.
Es tiempo de que todo el esfuerzo llevado a cabo por comisiones de fiestas, socios y colaboradores salga a relucir en estos días de elevada afluencia de público, donde se fomente la sociabilidad, convivencia y diversión. Estas organizaciones son en definitiva un fin necesario para el sostenimiento y supervivencia de la mayoría de las asociaciones de los pueblos pequeños. Ocupan tiempo y reuniones durante el año, concentrando ideas y propuestas, que acaban dando sentido a su existencia. También es momento de permitir el ruido, el alboroto y los sonidos de estos días, donde los jóvenes y no tan jóvenes debemos divertirnos y reír, siempre con el civismo que nos caracteriza y respetando a los demás.
La unión de la gente y su buen hacer hacen de nuestras localidades sitios acogedores que invitan a los de fuera a que vengan a visitarnos, a disfrutar de las tradiciones y de los bailes.Ojalá esta intensa actividad perdurara durante todo el año, donde hay que hacer cola de espera en el multiservicio, donde te cruzas con vecinos y familiares que no hemos visto hace años. En cualquier localidad que visitemos estos días seremos bien acogidos y seguro que no faltará alguna cerveza o refresco. Estos días tienen sentido gracias a la labor de todos los que forman parte de ellos, tanto las comisiones de fiestas con su labor altruista, los vecinos disfrutándolas y las fuerzas y cuerpos de seguridad velando por nosotros para que todo funcione. Solo podemos decir ¡viva agosto y sus fiestas!