En el número anterior nos referíamos a la empresa Santorromán con presencia en Daroca desde principios del s.XX en el sector de la imprenta y cartonajes, en cuyos talleres comenzó a trabajar con apenas 13 años, Victorino del Molino.


En el año 1913 aquella empresa estaba en un buen momento y continuó progresando en los años siguientes, sin embargo Santorromán consideró que para competir en el mercado del cartón tendría que trasladarse a lugares más próximos a sus clientes potenciales y en 1922 instaló su empresa en Zaragoza, traspasando la imprenta a Victorino, ya con 21 años, y hoy cien años después sigue en activo en Daroca en su tercera generación con su nieto Luis Jesús al frente.
Victorino había nacido en Daroca en 1901 y fue bautizado en la Parroquia de San Andrés de donde eran feligreses sus padres Benito, natural de Val de San Martin y la darocense Ygnacia-Cecilia Lozano.
El joven del Molino mantuvo el alto nivel profesional que había alcanzado su antecesor, y siguió progresando y modernizándose para adaptarse a las nuevas tecnologías. Trabajó, como ya había hecho Santorromán para los entes públicos de Daroca y su Comarca y también con sus clientes particulares con los trabajos de imprenta y la tienda de material escolar y de escritorio.


Su primer local estuvo en la calle Mayor 11, frente a Escolapios, trasladándose más tarde al número 72 de la misma calle.


En julio de 1926 Victorino casó con María Langa Bruna, de 27 años de edad y dos años después nació su hijo Luis que con el tiempo sería su sucesor en la empresa, que más tarde aumentaría su gama de productos con juguetería, perfumes, bisutería, etc.
Por esta época, Victorino, además de atender su empresa que contaba con 8 empleados, se encontraba muy implicado en la vida social y política de Daroca, llegando a ser alcalde entre los años 1954 y 1957, así como presidente del Hospital Civil de la Ciudad.
El 5 de julio de 1952, Luis Del Molino casó con la bilbilitana Pilar Verón Joven y de ese matrimonio nacerían tres hijos, Luis-Jesús, Víctor y Mari Carmen.
Luis estaba ya incorporado de lleno en la empresa, principalmente en su división industrial y se perfilaba como perfecto sucesor de su padre, de quien había aprendido todo lo relacionado con el negocio y de este modo la empresa tuvo posiblemente sus décadas más prósperas llegando a celebrar su 50 aniversario en 1972.
De los tres hijos mencionados de Luis y Pilar, el mayor Luis Jesús, nacido en 1960 sería, pasados los años, el continuador de la empresa.
Justo al día siguiente del día de Navidad de 1994 falleció, a la edad de 93 años, el fundador de esta sociedad, Severino-Victorino del Molino Lozano, quedando el negocio en manos de su hijo Luis que contaba con la inestimable ayuda de su primogénito Luis Jesús, que al igual que había sucedido en la generación anterior sería el sucesor de su padre, de hecho es ya en 1999, con 39 años de edad, cuando toma las riendas del negocio, aunque solamente la tienda, la imprenta se había cerrado recientemente, víctima en parte del imparable avance de las multicopistas.
Actualmente del Molino continúa ofreciendo a Daroca sus servicios de papelería, librería y material de oficina y escolar en el número 137 de la misma calle Mayor. También ofrece servicio de fotocopias como reminiscencia única de aquella imprenta. Y así, año tras año ha llegado a cumplir los 100, dando a Daroca motivo para sentirse orgullosa de tener entre sus murallas otra empresa centenaria.
Felicidades del Molino por tu primer centenario. ¡¡Bravo!!

Comparte esta Noticia

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *