Hace escasos días hemos conocido la noticia del despido fulminante de Chema López Juderías como director y trabajador de un medio de comunicación público, diario y de ámbito provincial: Diario de Teruel.
Este profesional consiguió reflotar un medio de comunicación que hace casi once años no estaba pasando por su mejor momento. Trabajar, gestionar y comunicar la información local y provincial es una tarea complicada y laboriosa, sobre todo cuando se trata de un territorio despoblado como Teruel. Aquí, una falta de gestión política puede tener consecuencias desastrosas, como lo que está ocurriendo en la emisión de la radio de Daroca, que desde hace más de un mes sigue emitiendo en vacío, debido a esa falta de apuesta por el medio de comunicación en sí, y no ser un mero altavoz de cualquier político.
Situaciones como esta suponen una situación complicada para el resto de compañeros que se esfuerzan día a día por sacar el medio adelante, pese a las trabas, presiones y la falta de consideración del resto de personas por valorar la información. Esta libertad de expresión y comunicación tiene que encajar además dentro del sistema capitalista que finalmente hace cuadrar las cuentas. Pero no todo es cuestión de números de balances positivos.
Un medio de comunicación en un terrotorio como el de Teruel, con una densidad de población de casi 10 habitantes por kilómetro cuadrado, donde la mayoría son personas de más de 60 años es difícil de sostener una venta diaria. Es en este punto donde las instituciones y la Diputación, con un presupuesto que asciende a 93,5 millones de euros en el último año, puede destinar una pequeña parte para impulsar este tipo de servicio, apostando por la rentabilidad social.
Quizá es necesaria una renovación en cuanto al formato, donde en vez de diario pudiera imprimirse cada tres días, por ejemplo, o descubrir cómo enganchar al público más joven, algo que sí consiguió con éxito, el ya anterior director, Chema López. Un despido que ha sido recibido de manera inesperada por el resto de medios, ya que su extensa trayectoria en este medio no apuntaba a prescindir de su perfil de la manera en que ha ocurrido.
La mayoría de los compañeros vemos en Chema una persona comprometida con el medio y defensora del trabajo realizado durante todos estos años, no solo de su propia redacción si no también de otros medios como el nuestro, ya que aquí en Teruel no nos vemos como competencia, si no como aliados. Las presiones que se ejercen sobre los medios para plasmar una noticia u otra existen, bien sean de carácter económico y/o político, pero esta persona había trabajado con todos los partidos desde que entró como director.
Todos estaban contentos con su labor, hasta este momento, que coincide con la entrada del nuevo socio de la Diputación, el cual parecía no estar muy conforme, Teruel Existe. Creemos que es un error garrafal y tanto el presidente como los socios de gobierno deberían explicarlo ante la sociedad, porque si de algo estaba orgulloso Chema era de su diario, de poder haber tejido redes de colaboración entre las diferentes asociaciones, entidades y colectivos para que se vieran reflejados en la crónica provincial de manera imparcial y transparente. Hay un lema en redes sociales que se denomina “sin periodismo no hay democracia”. Estaremos expectantes para ver qué candidato toma el relevo de Chema, aunque seguro va a ser muy difícil de igualar.
Desde El Comarcal del Jiloca, queremos mostrar todo nuestro apoyo a Chema ante esta pérdida de profesionalidad.