El candidato a la presidencia del PAR denunció en su visita a Daroca los problemas ante la falta de un médico
El candidato a la Presidencia del PAR, Alberto Izquierdo, ha asegurado que la Comarca Campo de Daroca y, en general, el medio rural aragonés “no pueden ser los paganos de la falta de personal sanitario porque todos los aragoneses vivan donde vivan tienen derecho a recibir unos servicios públicos de calidad”.
Izquierdo hizo estas manifestaciones el 9 de abril en su visita a Daroca, donde se ha reunido con cargos y militantes del Partido Aragonés de la comarca que le han transmitido, entre otras, su inquietud por los recortes en las horas de atención sanitaria que están sufriendo algunos de sus municipios, según informan desde la agrupación política en una nota de prensa.
Esta visita se enmarca en la campaña que Izquierdo está llevando a cabo por todo el territorio aragonés y en la que los militantes y simpatizantes de su formación política le están planteando los problemas y proyectos de sus municipios.
“El sistema sanitario aragonés está sufriendo graves problemas de falta de personal, pero no podemos permitir que el territorio, sus municipios, pierdan horas de atención por intentar solucionar las carencias en los centros de salud urbanos”, ha señalado Izquierdo.
En concreto, indican desde el PAR, se ha referido al problema que está sufriendo la Comarca Campo de Daroca ante la falta de un médico por baja laboral, “vacante que no ha sido cubierta porque la bolsa de trabajo está vacía y que ha supuesto un recorte en las horas de atención en localidades como Mainar, Villarreal de Huerva, Badules y Villarroya del Campo”, detallan.
Asimismo, los militantes del PAR le han transmitido su preocupación por que actualmente solo existen tres farmacias en la Comarca, en Daroca, Mainar y Herrera de los Navarros tras el cierre de la de Used, y los vecinos de los pueblos tienen que hacer muchos kilómetros para recoger sus medicamentos.
Por otro lado, en materia de vivienda, los militantes del PAR de la Comarca darocense proponen el aumento del parque de viviendas y la rehabilitación de aquellas que están deshabitadas a través de subvenciones o fondos europeos, así como el estudio de beneficios fiscales para que los propietarios de los inmuebles vacíos los pongan en alquiler.