
ARCADIO MUÑOZ Consejero de Cultura Comarca Campo de Daroca
¿Y si no amaneciera?
Qizá suene muy cinematográfico, pero se han preguntado si un día cualquiera, al levantarse, lo que hoy se denomina cultura se hubiese esfumado de la faz terrestre como por arte de magia, sin quedar vestigio alguno y es que aunque parezca un silogismo, existen personas, seres parlantes, encantadores de serpientes, adoradores del becerro de oro… afanados en suprimir todo lo que suponga adquirir conocimientos, ya lo predijo hace décadas François Truffaut en aquel memorable filme “Fahrenheit 451”.
Desde la Comarca Campo de Daroca y, concretamente en torno a esta Consejería, nos afanamos en acercar al mundo rural todo lo que suponga instruirse, ya sea desde el ámbito cinematográfico, selección de estrenos, filmoteca, o desde otro prisma, como pueden ser Grupos de Teatro, animación a la lectura, Festivales como Aragón Negro, implantación de cursos en colaboración con la UNED de Calatayud, música, Folclore tradicional y un largo etcétera.
No obstante, siempre aparecen sombras chinescas que enturbian el buen hacer y que les encantaría, al igual que el depravado Nerón, contemplar cómo arde Roma, y es que una sociedad marcada por la tecnología y los medios de información, donde predomina la incomunicación y el bienestar, la entrada de las masas dirigidas, en este caso desde cualquier punto de vista, era una idea que horrorizaba a Nietzsche, pues observaba que todo lo que sonaba a “cuestión social” constituía una amenaza contra la preservación de la cultura.
No obstante y a pesar de los guadafiones que siempre se intentan imponer, se olvidan que siempre quedan rezagados, lectores de mesilla, visionarios, que luchan por mantener de por vida y aunque a veces parezca un auténtico surrealismo, este fenómeno, llamado cultura, ya lo definió Protágoras en un diálogo con otro filósofo de la antigua Grecia llamado Platón, “lo que une a ambos -humanos y dioses- y les diferencia del animal es el espíritu, el pensamiento y su fuerza, la chispa prometeica, por la cual participan los hombres de lo divino”.