Un análisis en localidades de menos de 1.000 habitantes refleja la dificultad de mantener abierto este servicio

El 35,5% de las localidades de las comarcas del Jiloca y Campo de Daroca no disponen de servicio de bar. Son 32 de los 90 municipios en total analizados en un estudio de ADRI Jiloca Gallocanta.
Durante los meses de enero a marzo de este año, se llevó a cabo un cuestionario, en colaboración con el área de Desarrollo Local de la Comarca Campo de Daroca, con el objetivo de hacer una fotografía al detalle de la situación de los bares en las pequeñas localidades para, posteriormente, plantear actuaciones concretas.
El número de pueblos sin bar representa un “gran” problema, “ya que el bar es lo último que se pierde”, indican desde ADRI.
Además, en 18 localidades más expresaron su problemática de mantener la gestión del servicio, sobre todo, en el caso de locales de titularidad municipal. Esta situación se ha analizado detalladamente y en 31 de los bares, la gestión del establecimiento por una misma persona es inferior a 5 años, “lo cual demuestra la volatilidad a la que nos enfrentamos”, señalan.
Se trata de locales que en su mayoría son públicos y que, además, sus instalaciones son óptimas. “Las localidades suelen hacer grandes inversiones en estas infraestructuras: son locales de más de 60 metros cuadrados, que suelen tener cocinas, terrazas exteriores o incluso interiores”, detallan. Asimismo algunos ganan viabilidad al potenciar servicios adicionales, como multservicios rurales, servicios de habitaciones, restauración, hornos de pan, espacios de ocio, etc.
Tras el estudio -realizado en municipios de menos de 1.000 habitantes- se refleja que otros bares sociales no son del todo viables y, además, los Ayuntamientos tienen problemas para sacarlos a licitación, “ya que es complicado cumplir con la ley de contratación cuando se gestiona este tipo de servicios”, relatan.
Por ello, los consistorios creen que una serie de ayudas para el mantenimiento, beneficios fiscales (para los gestores y los propios ayuntamientos) o el acompañamiento a la hora de la selección de las personas que van a gestionar el local son fórmulas que ayudarían para que estos servicios fundamentales pudieran seguir en funcionamiento.
En el caso de los bares de titularidad privada, el funcionamiento es diferente y la mayoría llevan más de 10 años con las puertas abiertas, “aunque en este territorio son muy escasos este tipo de establecimientos”, precisan.
Próximas actuaciones
Entre las actuaciones previstas, por parte de la Comarca Campo de Daroca se va a comenzar a dar formación en herramientas de marketing a aquellos gestores de bares sociales que están empezando ahora su andadura. Desde ADRI y a través del proyecto de cooperación ‘Pueblos vivos Aragón’, se va a hacer una guía de estos locales en su página web con el fin de darles visibilidad.
Posteriormente, se seguirán dando pasos para mejorar la situación de estos servicios, “los cuales son muy importantes para que en los pueblos sigan existiendo espacios de sociabilización”, destacan. Por último, defienden que la colaboración y la generación de redes “es casi siempre la mejor respuesta para las diferentes problemáticas que surgen en el medio rural”.